Sus scrofa

Identificación: C-C: 90-180 cm C: 20-30 cm A: 55-110 cm P: 100-350 kg

Cuerpo macizo y cabeza cónica con un hocico alargado y móvil. Los colmillos son de crecimiento continuo y están bien desarrollados, en especial los inferiores que sobresalen de las encías hacia afuera y se curvan ligeramente para atrás; los superiores son más pequeños y crecen curvándose hacia arriba. El pelaje es grueso, áspero y con frecuencia existe una crin sobre la nuca. La coloración es parda grisácea, gris oscura o negruzca. La cría tiene la cabeza redondeada, el hocico corto y el pelaje con una serie de bandas longitudinales alternadas claras y oscuras, que le sirven de camuflaje; aproximadamente a los 6 meses el pelaje se torna rojizo y al año adquiere el color del adulto. El macho es más grande que la hembra.

Distribución: Originario de Europa, Asia y norte de África, fue domesticado hace unos 5000 años atrás dando origen al cerdo doméstico (Sus scrofa domestica) y como tal fue introducido por el hombre en casi todo el mundo. En Argentina la forma silvestre se encuentra en La Pampa y parte de las provincias de Mendoza, San Luis, Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires, Entre Ríos, Río Negro, Neuquén, Chubut y probablemente Santa Cruz. En Chile se distribuye entre las VIII y XI Regiones. En Uruguay está presente en todo el país. Como forma asilvestrada (chancho cimarrón) se encuentra en Buenos Aires, Chaco, Entre Ríos, Corrientes, Formosa, Paraguay y Brasil.

Hábitat: Vive en una gran variedad de ambientes, en especial con buena cobertura vegetal, como bosques y zonas arbustivas.

Costumbres: Vive en grupos de unos 20 individuos, aunque se han observado piaras de hasta 100 ejemplares. Los grupos están integrados exclusivamente por hembras con sus crías y juveniles; los machos adultos son solitarios y sólo se reúnen con las hembras durante la época de apareamiento. El área de acción en los machos varía de 200 a 2000 ha y en las hembras de 100 a 1000 ha. Para marcar el territorio frota sus flancos contra los árboles y raspa las cortezas con los colmillos. Tiene hábitos nocturnos y crepusculares y se desplaza grandes distancias en busca de alimento. Es buen corredor y nadador; con frecuencia toma baños de barro para limpiar su piel. Se comunica mediante resoplidos, gruñidos y chillidos. Localiza el alimento mediante el olfato, mientras escarba y remueve la tierra con el hocico. Su dieta es omnívora e incluye artrópodos, lombrices, pequeños mamíferos, reptiles, huevos de aves, hierbas, semillas, raíces e incluso carroña.

Reproducción: En las zonas tropicales se reproduce durante todo el año, en cambio en las regiones templadas los nacimientos ocurren con mayor frecuencia en primavera. Durante la época de celo los machos pelean entre sí por el acceso a las hembras. Cada macho forma un harén integrado por 3 a 8 hembras y luego de la cópula abandona el grupo. La gestación dura entre 100 y 140 días. Para dar a luz la hembra construye un nido con vegetales. La camada está integrada por hasta 12 crías, que pesan 500 a 1500 g, nacen con los ojos abiertos y pueden pararse a las pocas horas. Las crías permanecen en el nido durante una semana y luego empiezan a seguir a la madre en cortas excursiones. La lactancia dura aproximadamente 3 a 4 meses, pero ya en la segunda semana de vida comienzan a ingerir alimento sólido. A los tres años los machos se alejan del grupo y se vuelven solitarios. La madurez sexual se adquiere entre los 10 y los 18 meses. Puede vivir entre 20 y 30 años.

Situación poblacional: Por su carácter invasor constituye una amenaza para las actividades agropecuarias y para la estabilidad de muchos ambientes naturales. Debido a su hábito de desplazarse en piaras numerosas, hozando y pisoteando el suelo destruye la vegetación; a esto se le suma su alta fecundidad y la falta de enemigos naturales que lo controlen. En la Argentina fue introducido para la caza deportiva en 1906 en la provincia de La Pampa, en un coto de caza mayor; posteriormente algunos ejemplares fueron llevados a campos cercanos al lago Nahuel Huapi. En 1914 muchos ejemplares se escaparon de estos cotos y se dispersaron en varias provincias e invadieron incluso algunos Parques Nacionales como Lanín, Los Alerces y Nahuel Huapi. En 1953, por ley nacional, fue declarada especie dañina de las actividades agrícola-ganaderas. En Chile fue introducido desde la Argentina y en la actualidad se lo encuentra en el centro y sur del país. En Uruguay ha sido declarado plaga. Además de la caza deportiva, su cuero se aprovecha en talabarteria y marroquinería y en algunos lugares se lo caza para la venta de su carne en restaurantes.

Extraído de:  Olga Vaccaro y Marcelo Canevari;  con colaboración de Gustavo Carrizo.

Guía de Mamíferos del Sur de América del Sur. 1ª. Ed. – Buenos Aires: L.O.L.A., 2007. 424p.; 22 x 15 cm. ISBN 978-950-9725-81-2