Pinus pinea

N.V.: Pino piñonero, pino piñón, piñonero, pino parasol, pino.

Descripción: Árboles monoicos, perennifolios, de hasta 15-25 (30) m de alto, con copa amplia y aparasolada, redondeada en los ejemplares jóvenes. Corteza parda y marrón-naranja, muy gruesa, profundamente agrietada, con gruesas placas que se desprenden, dejando al descubierto capas de color pardo-rojizo. Yemas ovoide-acutiformes, sin resina. Hojas aciculares, en grupos de a 2, de 8-12 (20) cm de largo, flexibles a ligeramente rígidas, finamente aserradas, débilmente retorcidas, punzantes, verde-claras. Conos femeninos ovoides o globosos, de 8-15 (20) cm de largo, sésiles, con escamas ensanchadas hacia el ápice. Semillas de 15-20 mm, comestibles, con un ala ancha, rudimentaria.

Status y distribución: Introducida; nativa de la región mediterránea.

Hábitat: Prefiere suelos arenosos, cerca de la costa; es una especie termófila y xerófila.

Resistencia: -20° C.

USOS:

Madera resinosa, apta para construcciones, cajones y carpintería. Semillas (piñones) muy apreciadas en la cocina mediterránea. Corteza utilizada para extraer taninos. En Patagonia, sobre todo ornamental.

Extraído de:   Gut, Bernardo.
Árboles - Trees Patagonia. Árboles nativos e introducidos en patagonia. 1a. edición bilingüe - Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Vázquez Mazzini Editores, 2017. 416 p. ; 24 x 17 cm. ISBN 978-987-9132-54-8