Sorbus aucuparia

N.V.: Serbal, serbal de los cazadores, serbal silvestre.

Descripción: Árboles, de hasta 15 m de alto, con copa anchamente cónica. Corteza gris, lisa, reluciente. Yemas invernales agudas, asimétricas, marrón-purpúreas, tomentosas. Ramillas jóvenes pubescentes, tomándose en marrón-grisáceas. Hojas alternas, imparipinnadas, de 10-25 cm de largo, pecíolo de 1 -3 cm; pecíolo y raquis rojizos; folíolos generalmente en 6-7 pares, oblongo-lanceolados, hasta 6 cm de largo, el folíolo terminal un poco más corto que los otros; base redondeada o cuneada, a menudo, ligeramente oblicua; borde entero cerca de la base del folíolo, tajantemente aserrado más arriba, con dientes no pungentes; el haz de un verde oscuro, el envés verde-azulado. Las hojas pueden tomarse rojas en otoño. Flores blancas, de 0,8 cm de diámetro, que desprenden un olor algo desagradable. Frutos rojos, con frecuencia en corimbos densos, pesados.

Status y distribución: Introducida, nativa de Europa y Asia. En Patagonia, muy popular en los arbolados urbanos.

Resistencia: -36° C.

Observaciones: Existen varios cultivares y subespecies; además, hibridaciones con S. aria son bastante comunes. Con los frutos, que pueden ser venenosos en estado crudo, se elaboran mermeladas y jaleas.

USOS:

Madera: Para muebles y como leña.

Medicina: el duramen de S. aucuparia contiene el fenólico aucuparina que posee actividades antimicóticas. El fruto de S. aucuparia y de otras especies de Sorbus contiene el ácido alifático parasórbico, el cual es levemente tóxico, y D-sorbitol, empleado como edulcorante para diabéticos.

Extraído de:   Gut, Bernardo.
Árboles - Trees Patagonia. Árboles nativos e introducidos en patagonia. 1a. edición bilingüe - Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Vázquez Mazzini Editores, 2017. 416 p. ; 24 x 17 cm. ISBN 978-987-9132-54-8